viernes, 21 de marzo de 2014

TOMA DE DECISIONES

 INTRODUCCIÓN
Las personas a diario tenemos que enfrentarnos a una multitud de decisiones; unas serían simples como qué ropa ponerme por la mañana, que hacer de comer y otras más complicadas como qué carrera elegir o si fumar o no. Pero si nos paramos a pensar podemos observar que la mayoría de nuestras decisiones y conductas, no solo las simples, sino también otras más complicadas, son resultado de decisiones inconscientes, no meditadas o provocadas por presiones externas de terceros más que por nuestra propia determinación. Estas maneras de tomar decisiones deberían ser impensables, ya que aunque algunas consecuencias de decisiones equivocadas son mínimas, como elegir unos zapatos, otras consecuencias de decisiones erróneas pueden ser muy graves, perdurar durante mucho tiempo, afectar a la salud y al bienestar propio y de tu familia.

                      
Para resolver los problemas son importantes dos cuestiones:

- Orientación al problema: hay que ver el problema desde un enfoque optimista y positivo, el cual consiste en ver los problemas  como un reto, pensar que estos tienen solución, percibir que tienes la capacidad suficiente para enfrentarlos y tener voluntad para invertir tiempo y esfuerzo en su solución.
-Un método de resolución de problemas: es muy importante disponer de un sistema para tomar decisiones y resolver problemas. El método se compone de varios pasos que expongo a continuación:

1.      Definición del problema: Identificar el problema del modo más específico posible y saber que meta se persigue, es decir, aquí se intenta responder a las siguientes preguntas: ¿Quién está implicado?, ¿Qué sucede?,¿Dónde?, ¿Cómo?, ¿Por qué sucede? Y ¿Qué quiero?.

2.      Buscar alternativas: en esta fase se utiliza el brainstorming(lluvia de ideas), aquí se propone apuntar cualquier posible solución sin juzgar si es buena o mala desarrollando la creatividad ya que la cantidad de ideas suele generar calidad y más probabilidad de escoger la mejor.

3.      Valoración de consecuencias de cada alternativa:  Se leen las soluciones valorando las consecuencias positivas y negativas de cada alternativa corto, medio y largo plazo, se estima si para esas alternativas tenemos suficientes medios para realizarlas. También se estima la probabilidad de que puedan ocurrir los resultados pretendidos de cada alternativa, en qué medida esa alternativa puede solucionar el problema y cuánto va a padecer o disfrutar el sujeto con la elección.
Si tenemos varias alternativas con igualdad de eficacia, una será mejor que otra si requiere menor tiempo y esfuerzo considerándose el equilibrio entre los beneficios y costes esperados a corto, medio y largo plazo.

4.      Elegir la mejor alternativa: Una vez se han valorado todos los aspectos se toma la decisión eligiéndose una solución. Una vez elegida la solución se analiza si esa solución va a ser suficiente o se tiene que combinar con alguna otra y se establece un plan de acción compuesto por tácticas específicas para llevarla a cabo.

5.      Puesta en práctica de la decisión tomada y verificación de los resultados: Ha llegado la hora de actuar, llevando a la práctica las alternativas escogidas, valorando una vez realizadas en qué grado resuelven el problema, en qué medida se alcanzan los objetivos propuestos. Si el problema se ha solucionado se da por finalizado el método. Pero si la valoración es negativa habrá que analizar cuál ha sido el fallo para que no funcione y, si es preciso, cambiar la alternativa de solución.