Las personas
percibimos mediante nuestros 5 sentidos de olfato,vista, oído,sabor y gusto,
los objetos, personas y situaciones que nos rodean . Cuando nos hacemos una
impresión de una persona a primera vista estamos realizando una percepción social,
precisamente mi entrada de blog se va a centrar en este tipo de percepción.
La percepción social es un juicio básico que
realizamos sobre personas basándonos en información proveniente de
nuestros sentidos o en información facilitada por terceras personas, que nos
lleva a formarnos una impresión.
La formación
de las primeras impresiones cuentan con
poco material informativo, la mayoría de las veces la información que tenemos
de la persona tan solo es la apariencia física, modo de vestir, gestos
corporales u objetos que lleva consigo; pero aun así estas primeras impresiones suelen ser duraderas en el tiempo
y llevan a deducir características de personalidad y rasgos
emocionales de la persona observada e influyen en la forma de desarrollar las posteriores
interacciones.
Este tema ha
sido objeto de numerosos estudios de psicología, en la mayoría de los estudios
de la formación de impresiones, la forma de estudiarlo consiste en ponerles
fotos para que describieran a las personas a partir de ahí o en proponer a
sujetos información verbal sobre una hipotética persona (lista de adjetivos de
esa persona como por ejemplo inteligente,prudente,dormilona,desorganizada,cálida y responsable) y solicitarles que con esa información describan a las personas.
Estas listas eran leídas por los experimentadores a dos grupos de sujeto. En
las investigaciones a cada grupo les
leían la lista de adjetivos en diferente
orden, o bien en el mismo orden pero cambiando en cada grupo un adjetivo. Las
diferencias de impresiones en cada grupo fueron notables, llegando los experimentadores
a sacar las siguientes conclusiones:
- La
importancia del orden en que se perciben los rasgos: se encontró que para la construcción
de la impresión tenía más influencia los primeros adjetivos que se definían (efecto
primacía), aunque en determinadas circunstancias, como que se produzca una
pausa entre la presentación de los primeros adjetivos y de los últimos,
predomina el efecto de recencia, es decir, el prestar más atención a los
últimos adjetivos descritos. Por ejemplo si nos presentan una lista de adjetivos: inteligente,dormilona,cálida,optimista,ambiciosa,responsable,desorganizada; de estos adjetivos recordaremos más los primeros de la lista, o si ha habido una interrupción en la descripción nos quedaremos con los últimos.
- Correlación de
unos adjetivos a un solo adjetivo: Se comprobó que había adjetivos “centrales”
ya que había unos adjetivos que a
partir de ellos mismos se sacaban muchos más adjetivos relacionados ,
por ejemplo, con el adjetivo “cálido” las personas sacaban también los
adjetivos de “cariñoso”, “amable” y “feliz”.
- El tono
evaluativo de los rasgos informativos: Cuando la información que sabemos de una
persona contiene elementos positivos y negativos, los negativos tienen mayor
importancia y son más difíciles de
cambiar, más fáciles de confirmar y más difíciles de desconfirmar que los
rasgos positivos.
- Efecto Halo:
conociendo unas características del individuo presuponemos que posee también
algunas otras, por ejemplo si una persona es guapa seguramente también la consideremos
alegre,inteligente,agradable, o si vemos una persona sonreír podemos pensar que es alegre,optimista y feliz.
- Analogía
proyectiva: Dos personas que se asemejan en algún aspecto físico o psíquico
muchas veces son percibidas como semejantes en otros rasgos todavía no
demostrados.Por ejemplo una persona se puede parecer a un familiar en alguna característica física o en alguna psíquica, y ya por ello le asocias a esa persona inconscientemente otras características de tu familiar.
- Estereotipos:
tendencia a percibir a una persona en base a los atributos que caracterizan a
una categoría o grupo social, por ejemplo decir que un sujeto es “bromista” por
su origen andaluz.
Tras leer esto
ya sabemos que cuestiones influyen a la hora de formarnos impresiones. Yo
considero que es importante ser consciente de ello porque, aunque es una forma útil y práctica para desenvolvernos en nuestro ambiente social
y para poder responder adecuadamente a acontecimientos futuros, muchas veces caemos
en la trampa de juzgar sin conocer creando
estereotipos y estigmas, por ello es importante que nos demos cuenta y cuando
tengamos ocasión nos molestemos en conocer bien a las personas y las cosas que nos rodean ya veréis como os llevareis
grandes y agradables sorpresas con las personas y vuestro entorno.